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Un despertar poco romántico.


Una de las cosas más románticas en este mundo es despertar al lado de esa persona especial y decirle “buenos días amor mío” e inmediatamente darle un beso, sin embargo al despertar te das cuenta de que tus labios se sienten resecos, saboreas algo raro en tu boca, tu lengua esta blanca y ¡TIENES UN ALIENTO DE DRAGÓN!. Si despiertas en la mañana con una cubierta blancalechosa en tu lengua y que no se encontraba así la noche anterior, toma nota. Tu lengua se compone de pequeñas papilas gustativas, estas a su vez se forman por un grupo de células receptoras que están conectadas a ramificaciones nerviosas, las cuales envían señales al cerebro. Durante la noche cuando duermes, tus papilas gustativas se inflaman, esto se debe a que segregan toxinas que causan retención de líquidos y grasa, mientras estas se inflaman pueden capturar células muertas, bacterias y residuos de comida. El resultado al día siguiente, es mal aliento, quizá un sabor metálico en tu boca y obviamente tu lengua blanca. Si no quieres que la chica o chico salgan despavoridos al besarte, no te duermas sin cepillar tus dientes, toma agua antes de dormir, cambia tu alimentación, menos grasas y más verduras.

Redacción: Claudia Fabian

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