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No es un ave, no es un avión, no es Superman... es un ¡Diamante!


Los diamantes son minerales que debido al acomodo de sus átomos, en especial el carbono, presenta una estructura cristalina cúbica, este acomodo le confiere propiedades peculiares, como su alta dureza. Dichas propiedades son importantes, por ejemplo en la industria, por ser una herramienta de corte y de pulido. También tiene características ópticas que destaca su estructura cristalina con apariencia clara e incolora, y que puede dispersar la luz en diferentes colores. La mayoría de los diamantes naturales se forman en condiciones de presión y temperaturas extremas existentes a profundidades de 140-190km en el manto terrestre, donde las temperaturas alcanzan los 1400 ºC . Las altas presiones se producen por el peso de 180 kilómetros de rocas. Además, en el sitio de formación de los diamantes, existen otras sustancias como el nitrógeno y el azufre, los cuales pueden quedar atrapados en el cristal, añadiendo color a los diamantes. Los diamantes también se pueden formar en los cráteres generados por impacto de meteoritos, debido a la alta presión que genera el choque. Estos diamantes son muy característicos por su tamaño y se les conoce como microdiamantes. La producción de un material que sea más duro que un diamante natural, ha sido un reto para los científicos por mucho tiempo. En el 2004 un grupo de científicos del laboratorio de geofísica del Instituto Carnegie en Washington DC, produjo diamantes hechos de una mezcla de gases, a una velocidad 100 veces mayor que cualquier otro método que se ha utilizado hasta la fecha. Lograron hacerlos en un día. Sin embargo los cristales fueron tan duros que se rompió el equipo utilizado durante el proceso de formación. Si fuiste fan de la serie de Superman (Smallville), probablemente viste un episodio en el cual se necesita reponer un diamante. Clark Kent, con la increíble fuerza que posee, tomó un lápiz y lo compactó. De esta manera el carbono contenido en el grafito del lápiz cambió su estructura química a la de un diamante. Dicho proceso es el mismo que ocurre con los impactos de meteoritos. Aunque Superman es un personaje de ciencia ficción, parece que no estamos muy lejos de lograr tales hazañas, claro, esto no sucedería simplemente utilizando nuestras manos.

Redacción: Claudia Fabian

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